Los datos mundiales en torno a la obesidad y el sobrepeso son cada vez más preocupantes. Además, si se analiza la actividad física de la población, los índices disminuyen cada vez más con el paso del tiempo. En otras palabras, las personas están cada vez más lejos de una vida saludable y activa.
En ese sentido, más allá que se trabaje en la elaboración de dietas personalizadas o de planes de alimentación de alta calidad, lo cierto es que si la vida de las personas es sedentaria, son muchos los inconvenientes que se van a seguir presentando.
¿Necesita usted ir al gimnasio?
Si se piensa tan sólo en términos de salud, ir a un gimnasio es insuficiente e innecesario, resaltando que no sólo no consigue evitar que las personas hacen mucho tiempo sentadas, sino que no logra cubrir todas las recomendaciones de actividad física a causa de la falta de adherencia.
En muchos de los casos, esa falta de adherencia se explica porque su práctica necesita de tiempo, que en la mayoría de los casos en la vida moderna no se tiene a disposición.
¿Cómo se puede incluir la actividad física en el día a día?
Ya que el problema de la inactividad física hace parte de la vida cotidiana y que el gimnasio no es una solución adecuada, lo que se propone a las personas es que hagan lo posible por cubrir las recomendaciones de una actividad física todos los días y que eviten permanecer sentadas casi todo el tiempo.
Si se presta atención a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, se propone como mínimo 20 minutos todos los días de actividad física moderada. Sin embargo, las investigaciones apuntan a que el riesgo cardiovascular se vuelve mínimo si se superan los 7500 pasos por día.
Algunas de las sugerencias para modificar los hábitos cotidianos y propiciar la actividad física son:
- Usar las escaleras en lugar del ascensor.
- Ir y volver del trabajo en bicicleta o a pie.
- Caminar para llevar y recoger los niños en el colegio.
- Hacer la compra directamente en el supermercado y no a través de aplicaciones o similares.
- Evitar la utilización de los medios de transporte automáticos si los trayectos son menores a 20 minutos.
- Siempre realizar las tareas del hogar.
- Elegir los medios de transporte públicos.
- Simplemente salir a dar un paseo y caminar.
- La práctica de ejercicio físico que sea divertido.